Calendario de Luna 9

IX

A dónde quería ir María era una incógnita hasta para ella misma...


Esa mañana, como todas las mañanas de las últimas semanas María sentía náuseas, ardores, su cuerpo se rebelaba, harto de tragar, harto de engullir, harto de soportar, harto de aguantar, harto de permitir, harto de sufrir...algo la inquietaba...
María sabía de su incipiente embarazo, inesperado, sorpresivo, imprevisto...
María se sentía lejana a Raúl .

Y desde la inmensidad de la nada, repetimos una y otra vez, una y otra vez, UNA Y OTRA VEZ...

Mis sinrazones son acaso desamor, son acaso razones.

¿Fluctúo entre rareza y normalidad? ¿Quién lo determina? ¡Que mas  da! Mi vida es un estanque de agua podrida.

Anhelo aguas limpias, en movimiento, fluctuando, alma en marcha, alma en júbilo, anhelo serenidad, placidez, amor...

¿Dónde estás tú? Mi vientre no es el tuyo, condenado al vacío, no deseo llenarlo de desamor.

¿De donde saco las fuerzas?

María sentía la  vacua pesadumbre de su vientre y pintaba todo su sentir en paisajes, bosques imaginarios, veredas ilusorias y huecos que no conseguía entender.


Pero esa mañana era diferente, el diagnostico médico fue fulminante...
María  subió en su moto y en un intento desesperado,  con los ojos anegados en llanto, acelero mirando hacía atrás  la figura sin rostro, oscura, que con guadaña en mano la perseguía, acelero huyendo de la muerte...
María tenía cáncer y estaba embarazada. Los informes médicos eran aterradores, había que extirpar el órgano afectado...
Raúl volcó todo el apoyo del que era capaz en María . Y escondió su miedo apoyando se en Diego.